El Museo de Historia Natural Río Seco (MHNRS) tiene como misión crear y mantener en el tiempo un espacio de convergencia entre distintas disciplinas, oficios y saberes provenientes de diferentes ámbitos de las artes y las ciencias, con el propósito de divulgar estrategias y formas de producir conocimiento en torno a las relaciones entre cultura y naturaleza, con especial énfasis en el territorio austral y el medio local.
Esta instalación, ubicada en el antiguo galpón lanero del ex frigorífico de Río Seco (1903-1964), es el resultado de un proceso de trabajo que se inicia con el hallazgo de un varamiento de Ballena Sei (Balaenoptera borealis) sobre la costa de Bahía Inútil en la isla grande de Tierra del Fuego (diciembre del 2012).
En mayo del 2015, los biólogos marinos Benjamín Cáceres y Gabriela Garrido y los artistas visuales Aymara Zegers y Miguel Cáceres, más un grupo de diez voluntarios, levantaron y trasladaron los restos de la ballena a las dependencias del Museo; luego, entre el 2017 y 2018, se realizó la limpieza, catalogación y conservación de todas las piezas; y durante el 2019, se realizó el proceso de montaje junto a los técnicos e ingenieros Sebastián Aspée, Luis Chard, Sebastián y Luís Oyarzún.
La “ballena boba”, rorcual norteño, boreal o de Rudolphi, conocida también como Ballena Sei, es un cetáceo de gran tamaño que puede alcanzar entre 15 y 22 metros de longitud y pesar entre 20 y 40 toneladas. Luego de ser cazado a gran escala en los mares del sur durante el siglo XX, en 1976 se la declaró especie protegida por la Comisión Ballenera Internacional, vigente en Chile desde 1983.